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15 TIPS para mejorar tu ALIMENTACIÓN

Un cambio de alimentación es la clave. ¿Qué chica no sueña con tener un cuerpo esculpido por los dioses? ¡Todas! pero pocas hacemos algo al respecto, creemos que las dietas son la solución, pero en realidad son parte del problema. No queremos aceptarlo, pero en nuestro interior sabemos que sólo con un cambio permanente en nuestra alimentación veremos resultados.

Si estás dispuesta a comenzar el cambio, estos tips te ayudarán muchísimo.

Dile sí a lo integral

Si eres de las que desayuna cereal tendrás que cambiar esas cajas de cereal con arroz inflado sabor chocolate o de frutas, por algún cereal integral, no son como te los imaginas, hay muchas variedades y sabores que van a encantarte. U optar por pan integral con jamón de pavo o frutas.

Ni modo a compartir la chatarra

Cada que compres unas papas, galletas, pan, refresco, etc. Ofrece a todos a tu alrededor, con ello no sólo evitas calorías, si no que quedas como un buen amigo.

Disminuye las carnes rojas

Si eres de los que come carne todos los días, podrías estar dañando seriamente tu salud. No digo que tengas que despedirte de ella para siempre, pero debes empezar a disminurla hasta que sólo la comas una o dos veces por semana. Añade pollo a tu dieta, es una buena manera de comenzar.

Dale la bienvenida al pescado

Al disminuir tu consumo de carne roja, puedes ampliar tu menú. El pescado te aportará muchísimos beneficios y puras grasas buenas.

Evita lo frito

Que no te mientan, no necesitas agregarle aceite a nada, las verduras quedan perfectas al vapor. No importa qué tipo de carne consumas, toda sabe deliciosa asada o al horno. El sabor no está en el aceite sino en los condimentos.

Las calorías sí importan; Cuentalas

Los alimentos con muchas calorías contienen grasas y carbohidratos que se acumulan en tu cuerpo y comprometen tu salud. Cómelos de vez en cuando, aprende a contar als calorías, así no te pasarás y todo estará bien.

Busca ideas de recetas

No sólo estarás reduciendo las carnes y lácteos, sino que lo sustituyes por proteínas de otros tubérculos, verduras y frutas; además de que muchos de estos alimentos son riquísimos y baratos.

Reduce porciones

No elimines alimentos que frecuentas, en lugar de ello reduce tus porciones, unos platos pequeños te servirán para tener la sensación de que tu plato está lleno. Pero recuerda no quedarte con la sensación de estómago vacío.

Frutas en tu día

Frecuentemente cuando estamos con el ocio en la casa, no podemos evitar pensar en comida e ir directamente al refrigerador, te recomiendo que llenes tu refrigerador con frutas, así podrás comerlas en lugar de lanzarte a la tienda por alguna comida chatarra.

Ten un horario para comer

El desayuno es la clave para no tener antojos de comida chatarra durante el día, por nada del mundo debes saltarte este alimento. Te recomiendo hacer 3 comidas y 2 aperitivos al día. Mucho cuidado, no dejes más de 4 horas sin comer. Así tu metabolismo se agilizará y no almacenarás grasa.

Rodeate de gente positiva

Ya sea tu pareja, amiga o familia; intenta cambiar su alimentación junto contigo, así podrán ver cambios juntos, podrás evitar tener comida tentación en tu casa y será mucho más sencillo.

Agua

Puedes comenzar tomando muchos líquidos, eliminando principalmente los gasificados y poco a poco irlos remplazando por agua.  Se dice que debes de tomar 2.5 litros de agua diarios, pero ojo, recuerda beber sólo la que el cuerpo te pida, ya que muchos de tus alimentos ya contienen agua.

Ejercicio sí o sí

Es muy importante que junto con una buena alimentación, agregues un poco de actividad física. Para comenzar puedes cambiar un viaje en auto por una caminata, también puedes comenzar un deporte nuevo como correr, nadar, bailar, roller o incluso skate.

Duerme bien

Recuerda que es recomendable dormir por lo menos 8 horas al día. El descanso ayuda a tu cuerpo a regenerarse y cargar las energías necesarias para realizar las actividades del día siguiente. Además, cuando estas cansada tu cuerpo tiene más antojo de azúcar.

Hazlo gradual

Comienza con cambios graduales, es decir, medio litro de agua más de lo que normalmente tomas, ir a la tienda en bici, cambiar las papitas por una manzana, etc. Paso a paso podrás hacer un cambio verdadero.

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